Luego del hecho delictivo que ocurrió en nuestra localidad, donde un auto propiedad de Fabián Kolle fue robado de la puerta de la casa de su padre, en pleno centro de nuestra localidad y luego apareciera incendiado, hablamos con él y su esposa, Malena Martínez, para conocer detalles de lo ocurrido.
Al respecto, esto nos dijeron: «Habíamos estado de cena y reunión con amigos, hasta alrededor de las 7 de la mañana, en la casa de mis padres. Cuando nos fuimos, por la calle 22, hasta la 33 donde estaba estacionado el auto, nos dimos cuenta que no estaba. Pensé que era una broma, no pensé que me lo habrían robado. Entonces mi consuegro me dice, ¿Por qué no haces la denuncia? No sea cosa que te lo hayan robado y anden haciendo algo con tu auto».

 «Así que me llevó hasta la comisaría. El oficial de turno me dice que el jefe no estaba, que no me podía tomar la denuncia. Y le digo, mire yo creo que me robaron el auto. Como el jefe no estaba, le dije, bueno, mientras llegue el jefe, me voy a dar una vuelta a ver si veo algo. Y mi consuegro salió para el lado del cementerio y con mi hijo salimos para el lado de atrás de la vía. Cuando llegamos a la planta de silos de Buck, veo algo que humeaba, lejos de imaginarme que podría ser mi auto. Encima cuando lo veo, era blanco, así que no reconocía por el color tampoco! Entonces, le digo a mi hijo, hacé marcha atrás, porque como tiene equipo de gas, me dio miedo que explote. En ese momento no tenía saldo, así que le pedimos al sereno de Buck que llame a los bomberos y a los diez minutos o menos llegaron. Ya no había nada por hacer, pero yo quería que vengan por el peligro de los tubos de gas. Al rato llegó el móvil de la policía y mi consuegro, que venía de recorrer también. El jefe de policía nos dijo que volviéramos dentro de una hora hacer la denuncia. Esto fue como a las 10.30 de la mañana. Le dijimos todo como habían sido los hechos, que es lo mismo que estoy diciendo acá. Ahora vamos a esperar que es lo que dicen las cámaras, que es lo que filmaron. Porque con el tema del feriado no nos han podido decir nada. Lo que estamos esperando es una respuesta. Que nos digan quien fue y por qué lo hizo». 

Con mucha tristeza, Fabián Kolle señaló: «El auto es mi herramienta de trabajo. Nadie puede pensar que lo hice yo mismo, ni que fue un auto robo ni nada que se le parezca. Estoy esperando que esto se resuelva. Quedé desocupado. Ojala se sepa quién lo hizo. No se si voy a recuperar el valor total del auto, porque no se cuánto va a pagar el seguro. Pero el dolor, no me lo paga ningún seguro. Quiero creer que se va a esclarecer». 

Tanto Fabián como Malena expresaron: «Queremos agradecer a toda la gente que se ha comunicado con nosotros para expresar su solidaridad. Hemos recibido emails, mensajes por teléfono, por las redes sociales, en la calle, la gente se cruza para expresar su apoyo. Lo único que queremos es que se resuelva, que se sepa quien lo hizo, no queremos nada raro, solamente conocer la verdad. Seguimos tristes. Esto ha sido para la familia, para los amigos, para toda la gente de La Dulce y la zona, algo que impactó. Estamos como podemos, de a ratos parece un sueño. Pero es la realidad. Uno tiene fuerzas para seguir y a pesar de nuestro dolor, quisiéramos que esto no se vuelva a repetir y menos en La Dulce. Lo que necesitamos es una explicación. Queremos ver las cámaras. A partir de mañana que nos pueden decir. Todo lo que nos puedan decirnos va a ser muy útil. Y reiteramos, estamos agradecidos con todo el mundo». 

-¿Ustedes no tienen una sospecha o algún motivo que le hagan sospechar de alguien?
–«No, no tenemos sospecha. Tenemos una vida tranquila, no tenemos enemigos, al contrario, somos gente que tiene vida social, nos reunimos con amigos, sanamente, fue muy duro salir y ver que no estaba el auto. Y a partir de ahí, fue cada vez peor… porque encontrarlo en ese estado, nunca lo hubiera imaginado. Fue una maldad que para nosotros no tiene explicación, ni para nosotros ni para la gente. Por eso estamos conmovidos y la gente quiere como levantarse… porque esto es como la gota que rebalsó el vaso. Nosotros no culpamos a nadie, solamente queremos saber. No vamos a tomar represalias, el que lo hizo se arrepentirá, Dios lo iluminará… no se. Estamos pidiendo a cualquier persona que pueda aportar algún dato que lo haga. No necesita dar el nombre y no necesita involucrarse, pero quien pueda aportar datos, que lo haga para que se pueda investigar. No puede ser que nadie haya visto nada. Si los cubrimos, nos estamos haciendo daño a nosotros mismos». 

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