Se vienen vientos de cambios para La Dulce.

El Intendente electo Facundo López anunció que Juan Ángel Garré fue designado como Delegado Municipal.

No será tarea fácil ponerse el traje de autoridad máxima de la localidad. Hay mucho por hacer, por cambiar. Lo fundamental  conseguir el apoyo de la comunidad, que desde hace varios años no tiene ese guiño de aprobación para con quienes han sido sus representantes.

Faltó esa comunión que hace que exista un entendimiento, el trabajo en conjunto, una empatía genuina que invite al diálogo, el remar juntos para un mismo lado, sorteando corrientes que fueron adversas. Y un día el agua nos tapó y no pudimos, no supimos salir a flote y así estamos navegando en un mar de dudas, a la deriva.

Necesitábamos un cambio, del que tanto se habla por estos días, pero un cambio profundo y será tarea de los habitantes arremangarnos y comenzar a tirar todos para un mismo lado por el bien del pueblo, por las generaciones futuras, que se merecen que les demos una lección de lo que se puede lograr trabajando por un bien común. Que sientan orgullo por pertenecer y ser de este pedacito de suelo, olvidado, es cierto, pero que hoy tiene mas fuerzas que nunca para ser lo que alguna vez  supo ser.

Es tiempo de renacer pero las ganas tienen que ser de todos, hay que dejar de lado ciertos intereses personales y comenzar a remar para llegar a buen puerto y solo los pueblos que luchan lo logran. Aunque en algunas ocasiones se vengan tormentas, aunque en otras exista el sol o se avecine un vendaval de problemas. Siempre hay que luchar, con la frente en alto y el alma cansada si es necesario.

Pero nadie podrá quitarnos el orgullo de haberlo intentado.

Aún estamos a tiempo… No dejemos que el agua nos tape, que se lleve tantos deseos de progresar, de crecer.

Aprovechemos el aire que traen estos nuevos buenos vientos. Esa será nuestra tarea.

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